Bienvenida!!! Soy @Luzar21 y he creado este website para compartir mi recorrido, con mujeres que estén pasando por las mismas dificultades que yo, en la búsqueda del peso "ideal"! Peso ideal para mi, es aquél que proteja mi salud y aquel que me haga sentir cómoda y segura.
La historia de este sitio:
Mi edad es 40+ y antes de los 40 mi peso había sido normal con alguna tendencia al sobrepeso. NO ME GUSTARON NUNCA LAS DIETAS, las hice muy poco y las odié más. No recuerdo haber sido alguna vez delgada. Lo que había pasado hasta mis 40 era que los kilos adicionales eran temporales. No hacía nada especial, sencillamente desaparecian.
Para mi cumpleaños 40, estaba soltera y me propuse que para ese día iba a bajar de peso y fortalecer mi cuerpo. Trabajé controlando mis calorías (peso) y con un entrenador personal (fortalecer) y logré mi objetivo 58 kilogramos "fit". Creí que esto lo iba a poder hacer cada vez que quisiera, pero no ocurrió así.
Después de esto empecé ganar peso más rápido que en el pasado. Dos años más tarde me comprometí y quise perder los 5 kilos que para ese entonces ya había ganado. Trabajé sobre la premisa de calorías (1.200/día) y entrenaba en promedio 2 horas diarias 4 días a la semana. Sólo logré bajar un kilo.
Esta situación se mantuvo y sentía que estaba perdiendo el control. Yo elegía mis comidas favoritas con las que completaba mis 1.200 pero sin distinción del tipo de alimento y yo seguía para arriba.
Escuchaba a mis amigas hablando de cosas como: dietas, websites donde te diseñaban los programas (dietas), ejercicio, inyecciones, operaciones, gotas, suplementos, etc. Cuando tocas este tema te encuentras con muchas ideas, teorías, remedios mágicos, mitos pero al mismo tiempo te empiezas a dar cuenta que hay muchas cosas negativas al rededor de de estas prácticas con muy malas consecuencias para la salud.
No soy del tipo de persona que se deja convencer fácilmente y mucho menos que lance a hacer lo primero que le dicen y mucho menos una dieta o un remedio mágico. No niego en mi juventud hice la dieta del atún con piña o la de la sopa de verduras y me quedaron pésimos recuerdos y un resultado que no duraba más de una semana.
Pensé que si ya no funcionaba la manera tradicional (comida y ejercicio) tenía que ser porque algo en mi estaba mal. Seguramente la tiroides porque al fin y al cabo mi mamá sufre de tiroides y adicional las mujeres tenemos muy alta probabilidad de este padecimiento. Pasé el siguiente año consultando varios médicos y ninguno me decía lo que yo quería escuchar. Si bien mis resultados no eran claros en descartar el problema, tampoco eran claros diciendo que lo tuviera. Debo confesar que yo estaba esperando que alguien me dijera SI!!!! tu problema es la tiroides y así por fin entender por qué me pasaba todo esto a mi. Pero nunca pasó. Sólo me mandaban dietas: dieta líquida, un carbohidrato a la semana, porciones pequeñas, etc. Estas cosas las hacía por un tiempo pero ya estaba segura que no me iban a funcionar y para qué me sacrificaba tanto si al final no me iban a servir - pensaba.
Una de las grandes dificultades que tuve, fue perder la fe. Ya no creía nada de lo que me decían, porque no importaba lo que hiciera no funcionaba. Simplemente sentía que nadie daba con el chiste. Busqué otra alternativa. Investigar por mi cuenta.
En 2016 inició mi recorrido en esa investigación. El primer tema que abordé fue el metabolismo. Debe haber algo mal en mi metabolismo! - dije. Así llegué al libro "La Dieta del Metabolismo Acelerado" de Haylie Pomroy y me funcionó!. Primero que todo, incluye evidencia que te permite entender y comprometerte con lo que vas a hacer. Para mi es importante. No puedo seguir unos pasos, simplemente porque alguien me diga que es lo que debo hacer. Yo siempre recomiendo, que consigan los libros, lean, investiguen de BUENAS FUENTES.
Un mes después de haber iniciado el plan del libro había perdido 3,8 Kg. Alcancé los 60 kilos. Pero después de un año ya los había recuperado y les sumé otros 3,4. Alcancé los 67,2 Kg. Aclaro que no es que me hubiera enloquecido comiendo, simplemente no sostuve el plan (como suele pasar) y comí con algunos cambios porque cambié de ciudad y tuve que viajar mucho. El dolor y la preocupación que sentí en ese momento, fue y entonces a dónde voy a llegar a este ritmo? Voy a tener que dejar de comer y hacer cosas que me gustan? O tendré que asumir y aceptar que soy una mujer gorda? Ninguna de las dos ideas me gustaba. No quiero dejar de disfrutar la bendición que es la comida y tampoco quiero ser gorda porque afecta mi seguridad.
Cualquiera pensará que por qué no volví a hacer la dieta si me había funcionado tan bien, y la respuesta es porque no sentí que quería volver a hacerla. Me explico, la dieta es muy buena y en general agradable. Demanda tiempo y recurso como lo hace cualquier propósito, pero no la sentí mía porque yo necesito cosas que sean prácticas!!.
Los seres humanos somos INDIVIDUOS, lo que significa, individuales, únicos! Por eso no hay nada a la medida de todos. Hay que encontrarlo y cada quien debe recorrer su camino y encontrar lo que le funciona.
Decidí entonces que quería investigar otras cosas, seguir buscando, encontrar ese método o mecanismo que se ajuste a mi, que me funcione, que me gusté y que lo pueda hacer una y otra vez. Un estilo de vida.
Lo que quiero presentar acá, es este recorrido. Me enfoco en probar métodos sanos, seguros y especialmente sostenibles. Voy a leer e investigar para asegurarme que lo que digo es verdad. Si tu experiencia es similar y/o tienes como reto tener un peso correcto y poder disfrutar la comida, acá vas a encontrar un par de ideas, que puedes revisar y complementar con otros recursos.
Para mi cumpleaños 40, estaba soltera y me propuse que para ese día iba a bajar de peso y fortalecer mi cuerpo. Trabajé controlando mis calorías (peso) y con un entrenador personal (fortalecer) y logré mi objetivo 58 kilogramos "fit". Creí que esto lo iba a poder hacer cada vez que quisiera, pero no ocurrió así.
Después de esto empecé ganar peso más rápido que en el pasado. Dos años más tarde me comprometí y quise perder los 5 kilos que para ese entonces ya había ganado. Trabajé sobre la premisa de calorías (1.200/día) y entrenaba en promedio 2 horas diarias 4 días a la semana. Sólo logré bajar un kilo.
Esta situación se mantuvo y sentía que estaba perdiendo el control. Yo elegía mis comidas favoritas con las que completaba mis 1.200 pero sin distinción del tipo de alimento y yo seguía para arriba.
Escuchaba a mis amigas hablando de cosas como: dietas, websites donde te diseñaban los programas (dietas), ejercicio, inyecciones, operaciones, gotas, suplementos, etc. Cuando tocas este tema te encuentras con muchas ideas, teorías, remedios mágicos, mitos pero al mismo tiempo te empiezas a dar cuenta que hay muchas cosas negativas al rededor de de estas prácticas con muy malas consecuencias para la salud.
No soy del tipo de persona que se deja convencer fácilmente y mucho menos que lance a hacer lo primero que le dicen y mucho menos una dieta o un remedio mágico. No niego en mi juventud hice la dieta del atún con piña o la de la sopa de verduras y me quedaron pésimos recuerdos y un resultado que no duraba más de una semana.
Pensé que si ya no funcionaba la manera tradicional (comida y ejercicio) tenía que ser porque algo en mi estaba mal. Seguramente la tiroides porque al fin y al cabo mi mamá sufre de tiroides y adicional las mujeres tenemos muy alta probabilidad de este padecimiento. Pasé el siguiente año consultando varios médicos y ninguno me decía lo que yo quería escuchar. Si bien mis resultados no eran claros en descartar el problema, tampoco eran claros diciendo que lo tuviera. Debo confesar que yo estaba esperando que alguien me dijera SI!!!! tu problema es la tiroides y así por fin entender por qué me pasaba todo esto a mi. Pero nunca pasó. Sólo me mandaban dietas: dieta líquida, un carbohidrato a la semana, porciones pequeñas, etc. Estas cosas las hacía por un tiempo pero ya estaba segura que no me iban a funcionar y para qué me sacrificaba tanto si al final no me iban a servir - pensaba.
Una de las grandes dificultades que tuve, fue perder la fe. Ya no creía nada de lo que me decían, porque no importaba lo que hiciera no funcionaba. Simplemente sentía que nadie daba con el chiste. Busqué otra alternativa. Investigar por mi cuenta.
En 2016 inició mi recorrido en esa investigación. El primer tema que abordé fue el metabolismo. Debe haber algo mal en mi metabolismo! - dije. Así llegué al libro "La Dieta del Metabolismo Acelerado" de Haylie Pomroy y me funcionó!. Primero que todo, incluye evidencia que te permite entender y comprometerte con lo que vas a hacer. Para mi es importante. No puedo seguir unos pasos, simplemente porque alguien me diga que es lo que debo hacer. Yo siempre recomiendo, que consigan los libros, lean, investiguen de BUENAS FUENTES.
Un mes después de haber iniciado el plan del libro había perdido 3,8 Kg. Alcancé los 60 kilos. Pero después de un año ya los había recuperado y les sumé otros 3,4. Alcancé los 67,2 Kg. Aclaro que no es que me hubiera enloquecido comiendo, simplemente no sostuve el plan (como suele pasar) y comí con algunos cambios porque cambié de ciudad y tuve que viajar mucho. El dolor y la preocupación que sentí en ese momento, fue y entonces a dónde voy a llegar a este ritmo? Voy a tener que dejar de comer y hacer cosas que me gustan? O tendré que asumir y aceptar que soy una mujer gorda? Ninguna de las dos ideas me gustaba. No quiero dejar de disfrutar la bendición que es la comida y tampoco quiero ser gorda porque afecta mi seguridad.
Cualquiera pensará que por qué no volví a hacer la dieta si me había funcionado tan bien, y la respuesta es porque no sentí que quería volver a hacerla. Me explico, la dieta es muy buena y en general agradable. Demanda tiempo y recurso como lo hace cualquier propósito, pero no la sentí mía porque yo necesito cosas que sean prácticas!!.
Los seres humanos somos INDIVIDUOS, lo que significa, individuales, únicos! Por eso no hay nada a la medida de todos. Hay que encontrarlo y cada quien debe recorrer su camino y encontrar lo que le funciona.
Decidí entonces que quería investigar otras cosas, seguir buscando, encontrar ese método o mecanismo que se ajuste a mi, que me funcione, que me gusté y que lo pueda hacer una y otra vez. Un estilo de vida.
Lo que quiero presentar acá, es este recorrido. Me enfoco en probar métodos sanos, seguros y especialmente sostenibles. Voy a leer e investigar para asegurarme que lo que digo es verdad. Si tu experiencia es similar y/o tienes como reto tener un peso correcto y poder disfrutar la comida, acá vas a encontrar un par de ideas, que puedes revisar y complementar con otros recursos.
Mis dificultades y retos:
Estas son las circunstancias que me hay llevado a tomar el control sobre y peso y al mismo tiempo documentarlo en este web. Si compartes una o varias de estas, es posible que acá encuentres temas que te pueden servir. En relación con mi peso:
- Peso subiendo sin control.
- Tengo 40+ años
- Ya no me funcionan las cosas del pasado
- Las respuestas que encontraba en los médicos, se reducían a que estaba comiendo más de la cuenta, cuando NO, yo no estaba comiendo más, al contrario menos.
- Nadie te cree. Tu haces la tarea, no funciona, y además te dicen que no estas siguiendo las reglas!
- Frustración y rabia
- Deseos de dejar de intentarlo y optar por la resignación
- Escuchar consejos de todo el mundo, diciendo lo que es mejor para ti.
- Escuchar comentarios sobre tu peso.
- Sentirse incomprendido y solo.
- Encontrar una explicación que sea real, que pruebe lo que estoy pasando y que al mismo tiempo me permita lograr mi objetivo